Cómo reescribir desde tu esencia los textos de tu página web (I)

Por Eva Teruel

7 Sep, 2021
Dos jóvenes sentadas en el suelo de la calle y escribiendo en cuadernos, junto a un portatil.

Hace tiempo que quería realizar cambios en los textos de mi página web.

Reescribir algunas partes que ya no me resonaban tanto, y también otras que veía que se podían mejorar desde el punto de vista del copywriting.

Ya sabes…

Para transmitir mejor el valor de mi proyecto, lograr una conexión más fuerte con mis potenciales clientes y mejorar mis ventas. Y con ello, claro, mi impacto positivo en el mundo.

En líneas generales, veía que la comunicación de mi marca no estaba del todo integrada. Que el mensaje que transmitía mi web no era exactamente el mismo que latía dentro mí. Tampoco era el mismo que transmitía a través de las redes sociales.

El caso es que necesitaba encontrar ese momento para poner en orden esas ideas que bullían en mi cabeza, y trasladarlas a mi página web.

Al fin, aprovechando el parón siempre inspirador de las vacaciones así como el ritmo lento de las semanas que vinieron después, pude sentarme algo tranquila y ponerme a trabajar en ello.

Lo difícil no ha sido meter tijera y empezar a escribir (¡eso nos chifla a los copys!), lo complicado para mí ha sido hacer ese ejercicio de reflexión previo. Y es que, cómo cuesta parar y escucharse a una misma, ¿verdad?

Eso sí, una vez lo haces, ya todo va más rodado.

De hecho, nada más acabar con los textos de la web me vine arriba y di también un buen repaso al ebook  “Cómo escribir páginas de inicio que inspiran y venden”, la guía que regalo con la suscripción a mi newsletter. (¿¿Que aún no te has apuntado?? Uy uy uy ;-)).

Pues bien…

En este artículo quiero hablarte del proceso que he seguido para realizar esos cambios, por si tú también llevas tiempo sin sentirte del todo en sintonía con los textos de tu página web, pero no sabes bien por dónde empezar a reescribirlos. (Si aún no tienes web, este post te ayudará igualmente a enfocarlos bien desde el principio).

Como el artículo me ha salido largo, lo he dividido en dos, así podrás digerirlos con más calma.

¿Empezamos?

Paso 1: mirar hacia dentro

Pensarás que podía haberme saltado este paso. Es decir, ir a tiro hecho y reescribir sin más los textos que ya tenía.

Y sí, era una opción.

La cuestión es que quería hacerlo bien, y aprovechar la ocasión para volver a hacer un análisis un poco más concienzudo de mi marca y proyecto.

Ya lo había hecho el verano pasado con la ayuda del curso de Branding Estratégico, de Samu Parra. La formación me fue de gran ayuda para sentar las bases de mi marca, pero un año después, sentía que necesitaba volver a mirar hacia dentro.

Y es que las personas,  y con ellas los proyectos a los que damos vida, cambiamos, evolucionamos…

Es lo natural, ¿no?

Y nuestras páginas webs no pueden permanecer ajenas a eso. Si lo piensas, ¿qué es tu sitio web sino el relato de tu verdad como marca? Una versión simplificada de lo que eres y puedes aportar al mundo.

Por eso, no entiendo otra forma de escribirla (o reescribirla) que desde el autoconocimiento y la reflexión.

Elementos de tu análisis de marca

Nada mejor que hacernos preguntas para mirar hacia dentro y facilitar la reflexión, así que te cuento las que yo me hice antes de meter mano a los textos.

Te animo a que las contestes tú también y anotes tus respuestas en un papel. De momento, olvídate de tu página web.

¡Vamos a ello!

  • ¿Cuál es tu propósito superior? 

Esa misión que está por encima de tu negocio, y que tiene que ver con tu visión del mundo y con el valor que te gustaría aportar a la sociedad. Quizás hace un tiempo te costaba encontrarlo, y ahora ya lo ves mucho más claro. O a lo mejor empezaste impulsado por un propósito ilusionante, pero sin pulir. Y ha sido con la reflexión y los aprendizajes del día a día que has podido entender mejor cuál es esa misión superior que te mueve a levantarte cada día. 

  • ¿Cuáles son los valores qué definen tu marca? 

Tus valores son esas creencias importantes para ti que marcan los límites de tu negocio y tu forma particular de hacer las cosas. Cuando empezaste, quizás identificaste varios. Pero luego, en la práctica, unos han tomado más protagonismo que otros. O a lo mejor, después de un tiempo, te has dado cuenta de que había otros valores también muy integrados en tu ADN, pero de los que hasta ahora no eras consciente.

  • ¿Cuáles son las fortalezas y debilidades de tu marca?

Con la experiencia,  también vas siendo más consciente de qué cosas te gustan más y cuáles menos, de cuáles son tus puntos fuertes como marca y cuáles tus limitaciones. Necesitamos conocer y aceptar nuestras fortalezas y debilidades para sacar más partido a las primeras, e intentar mejorar o compensar las segundas de alguna forma. Esta información puede ayudarte, por ejemplo, a repensar los servicios que vendes en tu web o destacar en tus textos aquello en lo que más brillas.

  • ¿En qué es diferente tu producto o servicio?

Si lo que haces es idéntico a lo que hace todo el mundo, será más difícil que se fijen en ti. Por ello, es importante poner el foco en eso en lo que tu producto o servicio es diferente, y más importante aún, que lo comuniques. Si en el último año has incorporado alguna mejora en tus servicios o has identificado algún valor diferencial que antes no supiste ver, anótalo para contarlo en tu web.

  • ¿Quién es tu cliente ideal? 

Sobre este tema ya te hablé en mi artículo “¿Estás enfocando tu comunicación hacia tu cliente ideal?”. Sea quien sea tu cliente ideal, seguro que hoy lo conoces mucho mejor que cuando arrancaste con tu empresa. Porque no hay nada como la experiencia y el trato directo con las personas para conocerlas, sobre todo cuando lo haces desde la empatía y la escucha activa. Es posible, e incluso, que hayas pivotado y ahora te dirijas a un tipo de cliente diferente. En el primer caso, tocará afinar los textos. En el segundo, redirigirlos hacia las personas correctas.

  • ¿Quién es tu competencia más directa? 

Necesitamos saber qué marcas están haciendo lo mismo que nosotros para identificar oportunidades, amenazas y definir bien ese posicionamiento o lugar que nos gustaría ocupar en la mente de nuestros públicos. Y desde que empezaste, han podido surgir nuevos actores, nuevas marcas que no solo hacen lo mismo que tú, sino que también creen en lo mismo que tú. ¡Y está genial que así sea! Pero, eso nos obliga a trabajar más en la comunicación de nuestro proyecto, a hacerla más nuestra para no repetirnos y que nuestro mensaje sea único y diferenciador.

  • ¿Cómo quieres que suene tu marca? 

Experta, desenfadada, seria, divertida, retadora… La cuestión es huir de ese tono de voz neutro y frío que seguro has visto en otras webs de tu sector. Encontrar un tono de voz natural y con personalidad no siempre es fácil, por eso está bien que vuelvas a leer tus textos con calma y veas si de verdad suenan a ti. A veces también pasa, por ejemplo, que en nuestras páginas webs hablamos “muy serio”, mientras que en redes sociales nos mostramos más auténticas y cercanas. Si es así, habrá que hacer cambios para que toda tu comunicación hable desde una única voz.

  • ¿Qué estrategia de marketing hay detrás de tu página web?

Aquí ya pasamos a una cuestión mucho más tangible y que se sale del análisis de marca, pero que necesitas tener clara para que tu web no sea una isla perdida en medio del océano. Si llevas algún tiempo en el mundo digital, ya te habrás dado cuenta de que tu página web, por sí sola, no te va a traer grandes alegrías. Para que realmente te ayude en tu negocio, necesitas integrarla dentro de un plan de comunicación y marketing. Así que, este puede ser un buen momento para revisar y mejorar tu estrategia. Y eso incluye que los textos de tu web estén alineados con ella.

Bueno, con estas preguntas ya hemos dado un buen repaso a los pilares más importantes sobre los que debería asentarse tu comunicación. El mes que viene veremos cómo trasladar todo esto a tu página web.

Porque comunicar desde nuestra esencia y desde aquello que nos hace diferentes, no solo es más honesto. También, atrae más, conecta más y vende más.

Lo dicho, en unas semanas nos ponemos en acción.

¡Un abrazo!

📷 Foto de portada de Mary Taylor.

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